“La definición en cuestiones relativas al sendero de precios de los hidrocarburos, debe transformarse en una de las señales para el largo plazo ya que resulta clave para las inversiones”, dijo el ex presidente de YPF, Daniel Montamat, en el contexto de una reunión con diputados nacionales convocada por la Legisladora mendocina, Jimena Latorre a la que asistió surtidores.com.ar.

Montamat estuvo acompañado por los titulares del Instituto de la Energía, Jorge Lapeña y Gerardo Rabinovich, exponiendo sobre el Plan Estratégico que los ex funcionarios del área energética quieren implementar, dentro de la discusión legislativa que se espera cuando el Poder Ejecutivo dé a conocer su proyecto de reforma de la Ley de Hidrocarburos, anunciada por el Alberto Fernández y que por el momento “se mantiene bajo siete llaves”.

El ex secretario reconoció que los estacioneros “son el eslabón más débil de la cadena de comercialización” y en ese marco, comprendió el hecho de que cuando la Argentina queda expuesta a estos barquinazos de la macroeconomía, son ellos quienes sufren las consecuencias”.

Especialmente al referirse a los expendedores fue más allá y les sugirió: “Trabajen para que sus negocios estén enmarcados en políticas de largo plazo, porque de lo contrario, serán quienes se perjudicarán, cuando el sistema energético argentino debe ser parte de las soluciones que todos esperamos”.

Afirmó que “la inmediatez no resuelve ninguno de los problemas estructurales que tenemos y por ende, es preciso decidir qué hacer con los valores del petróleo y sus derivados”. Pero opinó que el documento firmado por todos los ex secretarios de energía de diferentes signos políticos, coincide en que los precios deben seguir las pautas internacionales.

Apoyó también el reclamo de las Cámaras de Estaciones de Servicio, quienes alertaron que si el gobierno no permite aumentar los importes a pico de surtidor, se verán imposibilitados de asumir los acuerdos salariales.

Al respecto aseveró: “deben tener razón los expendedores cuando dicen eso porque los salarios son un costo esencial para mantener la actividad comercial y dentro de esta estructura, los operadores minoristas deben tener una rentabilidad razonable que les permita absorber los costos y sin dudas, los precios al consumidor son el camino”.