La provincia de Córdoba adelantó las elecciones para gobernador y autoridades provinciales y varias iniciativas para reformar leyes en el territorio quedaron postergadas ante la campaña. Fue el caso por ejemplo de un pedido de informes para demostrar si los empleados de Estaciones de Servicio están sometidos a un “trabajo insalubre”.
El representante del Radicalismo Mestrista y autor del texto original del proyecto, Benigno Rins, explicó a surtidores.com.ar, que “lamentablemente no pudo ser tratado en el recinto de la legislatura porque la contienda electoral dejó muchas leyes sin debatir”.
Sin embargo, se mostró confiado en que después del 12 de mayo, fecha en la cual, los ciudadanos cordobeses acudirán a las urnas, “podamos junto con los otros bloques llegar a un acuerdo y poder elevar la discusión de esta norma a la cámara provincial”.
Recordó Rins que de acuerdo a lo expresado en la iniciativa por él preparada, “se le solicita al Gobierno provincial que por medio del Ministerio de Trabajo determine si las tareas desempeñadas por los expendedores de combustibles líquidos constituye un trabajo riesgoso de acuerdo a la peligrosidad de las sustancias”.
En sintonía con otros proyectos similares en otras provincias como lo es en Entre Ríos, el diputado busca el apoyo de sus pares para que por medio de la ley, “se reconozcan mayores protecciones y derechos a los trabajadores, postergados en materia de prevención y cuidado de la salud”.
Justificó que estos problemas están siendo reconocidos a nivel mundial porque los empleados del sector estacionero manejan cotidianamente sustancias peligrosas y que requieren un cuidado especial para el ser humano y el ambiente.
Destacó los efectos colaterales de esta manipulación como lo son los hipotéticos daños en la piel, la sangre y el sistema nervioso y neurológico, sin contar posibles secuelas cancerígenas provenientes de los químicos de los hidrocarburos.
Adujo finalmente que de acuerdo a los estudios hechos en los Estados Unidos, la exposición a las gasolinas, pone en peligro la salud humana por las dosis de tolueno, plomo, benceno y xileno.
En ese sentido recalcó que la Superintendencia de riesgos de Trabajo tiene específicamente indicado que debe existir un servicio de medicina laboral que monitoree y revise periódicamente a los empleados de las Estaciones de Servicio.