Los empleados de Estaciones de Servicio, específicamente aquellos que se desempeñan en la playa suelen ofrecer a los automovilistas un trato más personalizado, que no solamente pasa por despachar combustibles.
Estimulados por la capacitación y las directivas de la empresa por sumar valor agregado, el contacto con los automovilistas ofrece además la posibilidad de “juntar unos pesitos extras” al final de la jornada. De ahí que los playeros y playeras, se las ingenian para acercarse al cliente con simpatía y vocación.
“Los que ya nos conocen de cargar casi todos los días, siempre tiene una atención con nosotros y aquellos que vienen por primera vez, por lo general, acceden a que le repasemos los parabrisas o controlemos los niveles de agua y aceite”, destacaron a Surtidores dos empleados de una expendedora Axion de la zona de Vicente López.
De acuerdo a los dichos de los consultados, existen diferentes tipos de consumidores: los que suelen interactuar más con su automóvil y aquellos que nunca descienden del vehículo para cargar. “Pero todos suelen dejar una propina que al final del horario repartimos en común”, expresaron.
LA CAPACITACIÓN ES CLAVE EN EL SERVICIO
La profesionalización del oficio fue mutando con el tiempo, y a tono con las necesidades de los clientes, las compañías, las cámaras del sector y hasta los sindicatos, abrieron sus horizontes a la capacitación de sus empleados.
Este mes comenzaron los cursos en la Mutual 27 de Agosto perteneciente al Sindicato de Empleados de Estaciones de Servicio, que se extendió a varias localidades del país, llevando nociones nuevas sobre operación integral de Estaciones de Servicio y Minimercados hasta el aprendizaje de las funciones del Gerente o Encargado del negocio.
Estos cursos son gratuitos y aptos para que puedan participar trabajadores de la actividad que deseen profesionalizarse y personas desocupadas que les interese ingresar a la misma.