Con la participación de la oposición
El ex Secretario de Comercio, Lic. Miguel Ponce expresó que “se torna urgente que las empresas de energía escuchen la palabra del candidato vencedor para delinear un acuerdo de precios de las naftas y las tarifas luego de la escalada del dólar”.
El histórico funcionario del Ministerio de Economía del Gobierno de Raúl Alfonsín, aseguró que “ las compañías refinadoras están con la intención de actualizar los precios al surtidor, tras la explosión del tipo de cambio”.
Recordó que “se habían comprometido ante el Presidente Macri, mantener el valor del litro de combustibles hasta después de las PASO, para evitar un brote inflacionario aún mayor, ante las encuestas que hablaban de una derrota por mínima diferencia del oficialismo en las primarias”.
Sin embargo, alertó que “las petroleras, tampoco vieron venir este resultado tan abultado para la oposición y descartaban hasta el jueves pasado que el gobierno había recuperado terreno hasta un virtual empate técnico que finalmente no se dio de ninguna manera”.
Adelantó el especialista que “hoy por hoy, la palabra de Macri ante los CEOS de las petroleras ya carece de peso y es por ello que se hace necesario que se sienten en la mesa de negociaciones con Alberto Fernández para evitar un crecimiento de precios de las naftas imparable”.
De la misma forma, habló de convocar a las compañías de servicios públicos para que se comprometan a la gobernabilidad hasta el día de la elección general, dado el estado de incertidumbre que provocó la derrota electoral oficialista.
Recordó finalmente que “el impacto inflacionario que los sucesivos aumentos produjeron en las familias, recayó sobre las Estaciones de Servicio que vieron retrotraerse en sus ventas, con los perjuicios que causa para el sostenimiento de los gastos fijos que en su mayoría, corren a la par que el tipo de cambio”.
En ese sentido Ponce admitió que “sin la participación de los nuevos actores de la política que dejaron los resultados del pasado domingo, la inestabilidad del sector será imposible de controlar y las ventas caerán mucha más de lo que vienen derrumbándose ahora”.
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