Esta semana, las petroleras elevaron los valores de venta mayorista a los distribuidores particulares pequeños y medianos que revenden a las expendedoras sin bandera y al canal directo del agro.

El incremento del precio mayorista tanto para nafta como para el diesel en todas sus variantes, promedió el 6 por ciento en general, en línea con la actualización de la semana pasada que inició YPF y siguieron las demás compañías para el canal de Estaciones de Servicio.

“Algunas marcas, sin embargo, subieron las naftas hasta un 6,5 por ciento, lo que resulta por encima de lo que se incrementaron en el surtidor, hecho que hace que las estaciones blancas tengan cada vez más ajustados sus números”, dijo a surtidores.com.ar, el empresario Sebastián Barinaga.

Todos los mayoristas consultados admitieron que están dialogando con sus respectivas compañías proveedoras, para acordar un margen en conjunto que les permita afrontar la estructura de costos que sigue en aumento.

“Sueldos, mantenimiento de camiones, precios de las cubiertas, peajes y demás insumos siguen aumentando, por lo cual no podremos sostener el punto de equilibrio, si no se concreta una elevación del precio de los combustibles a nivel mayorista de por lo menos un 3 por ciento más”, calculó el referente del rubro.

Adelantó que, si por otra parte no hay más subas del litro al público de los combustibles líquidos como parecería ser que el gobierno ya tiene decidido, puede haber complicaciones de abastecimiento y de sostenibilidad para los expendedores de menor cantidad de volumen antes de fin de este año.

Finalmente expresó que en el gasoil el margen es muy estrecho, pero con un 3 por ciento más, “no estaríamos tirando manteca al techo, pero por lo menos podríamos estar un poco más tranquilos para afrontar las obligaciones que tenemos todos los meses para mantener la actividad”, concluyó Barinaga.