En ese contexto, los investigadores buscarán un tipo de tubos de GNC adaptados a los vehículos que ocupen menos espacio y sean más livianos. Al respecto, el economista y especialista en equipos de gas para autos, Mariano Rodríguez explicó su opinión a surtidores.com.ar sobre la posibilidad de que se traslade esta tecnología a nivel nacional.
Expresó que todo es posible siempre y cuando haya decisiones políticas que partan de un concepto claro sobre los beneficios del GNC que hoy sigue vigente más que nunca en las principales potencias del mundo.
“El hecho de que un país como Estados Unidos esté proyectando nuevas formas de ahorrar espacio a través de nuevos tipos de tubos, es una demostración de que el futuro del GNC, es un punto a favor del sector en la Argentina dadas las características históricas del negocio local y las proyecciones de exportación”, dijo Rodríguez.
Agregó que el gas automotor sigue siendo el más conveniente para los consumidores que buscan ahorrar presupuesto familiar, y recordó que “estamos geográficamente ubicados sobre la segunda reserva no convencional del planeta”.
Aseveró que la escasez del petróleo a nivel internacional y los conflictos entre los países productores de hidrocarburos lleva a quienes poseen una industria del GNC desarrollada como la de Argentina a competir en los próximos diez años con la incipiente actividad de los automóviles eléctricos.
“El combustible fósil no va a existir más y si desde el Estado Argentino se toma la idea del cilindro norteamericano, se afianzará una masividad de este tipo de combustible en poco tiempo, no solamente para los automóviles particulares, sino para colectivos y transporte de carga”, adelantó Rodríguez.